DÍA 23
Ayer mi cirujano me dijo que ya
podía andar con los zapatos ortopédicos, después de tres semanas de la operación.
Al hacerlo, sentí dolor en los pies, cansancio, sensación de no saber andar
etc. Hoy un día después la cosa ha mejorado bastante. Me he levantado tres
veces de la cama sola esta mañana.
La primera, ha primera hora de la
mañana he necesitado ayuda de mi madre, volvía a sentir que me dolía todo, es
una sensación muy rara, parece que se vaya a romper el pie. Estaba con mucha tensión
y haciendo demasiada fuerza y presión, a la hora de andar.
La segunda vez me he armado de
valor y he pensado que no le debía dar tanta importancia al dolor, sino mejorar
mi postura al andar y no hacer tanta fuera con las manos al apoyarme.
La tercera vez prácticamente he
andado sola, apoyándome claro, con las paredes, puertas, muebles, y cuando no
he tenido apoyo he pedido ayuda. De momento no tengo mucho equilibrio, pero voy mejorando cada vez la postura al andar.
El dolor sigue, pero no es tan
pronunciado, e intento “pasar de el” como he dicho, prefiero concentrarme en
andar bien, en apoyar correctamente los pies y a volver a acostumbrar mi cuerpo
a andar y que no se vuelva vago o miedica.
Como veis en un día he ido
mejorando, cada vez me canso menos, no me falta tanto el aire y voy cogiendo
confianza conmigo misma. La verdad que estoy muy contenta. ¡Voy viendo la luz! y eso motiva MUCHO.
Comentarios
Publicar un comentario